Una caravana con al menos 4.000 migrantes ha salido este lunes del Parque Bicentenario de Tapachula, en el Estado de Chiapas, según informan varias oenegés. Organizaciones como Médicos Sin Fronteras (MSF) ya habían denunciado en septiembre las malas condiciones en las que vivían miles de personas en la ciudad fronteriza con Guatemala, donde esperaban a regularizar su situación en México en unas oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) saturadas.
La caravana ha iniciado la marcha esta mañana a través de la ciudad y ha tomado la carretera federal 200, que recorre la costa del Pacífico en dirección a la localidad de Arriaga. En este municipio chiapaneco que limita con el Estado de Oaxaca, MSF tiene una base de ayuda humanitaria que espera al gran grupo de migrantes, aunque su coordinadora general de proyectos, Gemma Domínguez, informa de que este tipo de multitudes suelen ser disueltas antes de llegar. El Gobierno ya desplegó en 2021 varios operativos con cientos de agentes para frenar el tránsito de los migrantes.
Este lunes al mediodía, la caravana se encuentra parada en la pequeña localidad de Álvaro Obregón, según ha explicado en llamada telefónica el periodista de Univisión Pedro Ultreras. El pueblo, que con 6.000 habitantes se ve casi superado por los migrantes, está a tres horas a pie desde Tapachula, y los migrantes se han instalado allí a la espera de volver a reanudar la marcha este martes. Los días anteriores han sido lluviosos en el sur de Chiapas por las nubes de la tormenta tropical Pilar, que se dirige al Estado desde el Pacífico. “Los migrantes están entre los parques, las casas, no hay mucho resguardo si llega a haber una tormenta como la de los últimos días”, ha descrito Ultreras.
La salida de la caravana se da tras meses de tensión en Tapachula. El pasado lunes 25 de septiembre, entre 5.000 y 6.000 personas se agolparon frente a la sede de la Comar, que llevaba cuatro días cerrada. Un grupo de migrantes que esperaba desde hacía varias jornadas trato de entrar por la fuerza a las oficinas y la policía municipal y la Guardia Nacional tuvieron que disolver las protestas. Algunas personas denuncian que tienen que esperar meses para resolver su documentación en la localidad.
La Comar ha registrado un número de solicitudes récord este año en todo el país. Hasta septiembre de 2022 habían recibido a 86.376 migrantes, mientras que este año el número asciende 112.960. Más del 50% de estas solicitudes se han atendido en la oficina de la institución en Tapachula. Allí, miles de personas se encontraban varadas sin acceso a servicios sanitarios, agua y saneamiento, según MSF. Andrés Ramírez, director de la Comar, ha confesado en varias ocasiones que el ente que dirige “no puede hacer más”, como declaró el pasado mayo en W Radio.
Ese mes se produjo el fin del Título 42 en Estados Unidos, un mecanismo que el entonces presidente, Donald Trump, instauró durante la pandemia para poder devolver a los migrantes inmediatamente en la frontera entre México y su país. Su extinción hizo que miles de personas se lanzaran a cruzar Centroamérica buscando llegar al límite norte con EE UU, y ese mes de mayo se superó cualquier cifra anterior de solicitudes en la Comar, que recibió a 14.331 personas.
Las caravanas como la que ha salido este lunes de Tapachula son una forma de viaje que los migrantes usan para autoprotegerse de los peligros de la ruta. Las primeras multitudes empezaron a salir en grupo desde varios países centroamericanos en 2018, normalmente con el objetivo de llegar a la frontera con Estados Unidos. También son una forma de presión para tratar de acelerar los procesos burocráticos y regularizar su situación. El último precedente en México fue en abril de este año, cuando un grupo de 3.000 personas salió de Tapachula tras meses de espera por una visa humanitaria en el país.
México se encuentra en una crisis migratoria sin precedentes, en un año en el que se ha arrestado a más personas en situación irregular que en cualquier otro de la época reciente. En lo que va de año, el Instituto Nacional de Migración ha contabilizado 501.709 “eventos con migrantes irregulares”, un eufemismo que la institución usa para referirse a las detenciones. Ya ha superado la cifra de todo 2022.
El presidente, Andrés Manuel López Obrador, organizó el pasado 22 de octubre una cumbre con los mandatarios de 10 países latinoamericanos y del Caribe para buscar soluciones estructurales al fenómeno migratorio. La conclusión principal que se desprendió del documento firmado por todos los presentes fue que las sanciones económicas de Estados Unidos contra Venezuela y Cuba contribuyen a la migración. Las oenegés esperan soluciones más específicas, mientras que denuncian la mala situación que obliga a los migrantes a salir en masa de lugares como Tapachula, donde no se garantizan las necesidades básicas.
Fuente : 800 Noticias