Tal como se indicó en el cronograma escolar, el 2 de octubre inició el regreso a clases en todo el país. A pesar de las múltiples exigencias y protestas organizadas por educadores en más de 23 estados en el ámbito nacional, los docentes se reincorporaron a las aulas sin aumento salarial. Mientras tanto, padres y representantes tuvieron que bregar con el alza de precios de los útiles escolares con quincenas que continúan devaluándose.
Representantes y educadores declaran haber “comprado lo que pudieron” para garantizar a sus hijos el regreso al sistema lo escolar: uniformes, zapatos y útiles escolares.
A pesar de la visita de las brigadas comunales militares para la educación y la salud (bricomiles) a los planteles públicos, el personal aclaró que el mantenimiento solo contempló pintar la fachada y la donación de láminas de zinc para hacer algunas mejoras en los techos, lo que deja a la mayoría de las escuelas en malas condiciones para recibir a los estudiantes.
“Las instalaciones siguen deterioradas en cuanto a mesas y sillas. Podemos arreglarlas con ayuda de la comunidad y pienso que también con apoyo gubernamental”, declaró una docente que prefirió reservar su identidad.
“Estamos preparándonos para recibir a los niños con valores en cada uno de ellos, pero hay que apoyarnos y ser solidarios. El salario es mínimo y no nos alcanza. Deberían de apoyarnos en el aumento salarial para todos”, alegó una educadora del sector.
Según las cifras del Colegio de Profesores del estado Bolívar, 80% de los colegios del Estado tienen problemas estructurales. A su vez, la deficiencia en los servicios de agua y electricidad azotan a toda la municipalidad.
“En el urbanismo el agua es deficiente y la escuela se ve afectada. En vacaciones le colocaron las luces y fue pintada. Podemos decir que está en mejores condiciones que el año pasado”, manifestó una de las maestras que atendió el llamado a reincorporarse.
Padres deben gastar más de 50 dólares para costear la escolaridad
La situación que viven los padres y representantes es cuesta arriba, puesto que los salarios, incluso en el sector privado, no superan los 100 dólares mensuales. Para los trabajadores públicos la situación es aún más precaria, ya que perciben solo 130 bolívares como pago.
Ante la falta de recursos, los guayaneses intentan comprar solo lo indispensable para sus hijos; no obstante, afirmaron que como mínimo deben gastar 50 dólares para poder llevarlos a las escuelas, lo que representa más de 15 salarios mínimos.
“Las cosas están muy costosas. Muchos niños regresan con el uniforme del año pasado, con un solo cuadernito mientras puedan comprar los útiles. Nosotros les dijimos que sí. Que pueden volver con lo que tengan”, manifestó la titular de un grupo de sexto grado.
El equipo de Correo del Caroní se trasladó a las instituciones para conversar con algunos representantes que se acercaban a dejar a sus hijos. Se constató que los planteles públicos han flexibilizado considerablemente las exigencias en torno a uniforme, permitiendo que los alumnos asistan con zapatos no reglamentarios.
“Cuesta un poco porque las cosas no están bien. Gasté aproximadamente 50 dólares entre útiles y uniformes”, afirmó un representante de la Unidad Educativa Básica Silvana de Irady.
Otra representante aseveró que gastó 200 dólares, pero que no representó un esfuerzo puesto que su pareja trabaja en las minas para poder costear la educación de sus hijos.
El policía va a la escuela: plan nacional inicia en Bolívar
Este lunes funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana asistieron la Unidad Educativa Nacional Mercedes Prospert como parte del despliegue del plan nacional El policía va a la escuela.
Esta iniciativa tiene como fin diseñar y ejecutar proyectos de prevención en los planteles, así como el estímulo de la organización estudiantil. Los funcionarios promoverán los valores de seguridad y protección.
Asimismo, la directora del centro educativo afirmó estar tranquila con la presencia de los funcionarios, ya que la inseguridad del sector aunada a la ruptura de la cerca perimetral de la institución ha traído como consecuencia que el personal en horas de la tarde sea víctima de asaltos.
Fuente : El Impulso