La muerte violenta de una niña de 11 años, ocurrida este miércoles en las afueras de Buenos Aires, paralizó la campaña electoral en Argentina, país que celebra primarias el próximo domingo.
El ataque fue sufrido por Morena Domínguez cuando iba a la escuela y fue abordada desde una motocicleta por dos personas que querían robarle la mochila. La chica fue arrastrada por el suelo y recibió un fuerte golpe en el hígado, como aclaró la autopsia efectuada, lo que le causó una hemorragia interna y la muerte en el hospital Evita, de Lanús, ciudad de la provincia de Buenos Aires.
Por el momento, hay siete personas detenidas y, aunque inicialmente un menor de 14 años confesó haber participado en el ataque, después cambió su declaración.
Tras conocerse el ataque, los principales aspirantes a la Presidencia argentina, que este domingo compiten por oficializar su candidatura, anunciaron la suspensión de varias actividades proselitistas que tenían previstas para este miércoles y el jueves, coincidiendo con el cierre de campaña.
La exministra de Seguridad Patricia Bullrich, que suspendió la actividad que preparaba para el jueves precisamente en Lanús, escribió un mensaje en su cuenta de Twitter, en el que expresó su «acompañamiento y apoyo a la familia y amigos».
«No podemos seguir viviendo con tanta angustia y miedo. Esto no da para más. Transformaron a la Argentina en un país invivible», concluyó la aspirante de la alianza Juntos por el Cambio (centroderecha), quien tiene un discurso duro y represivo respecto a su combate al crimen.
En idénticos términos se expresó el candidato libertario Javier Milei, quien escribió en esa red social que el suceso tiene como responsable a la «clase política» que lleva décadas poniendo «a las víctimas en el lugar de los victimarios, y a los delincuentes en el lugar de las víctimas».
«Queremos terminar con este modelo que defiende a los delincuentes y volver al único modelo que funciona: la represión del delito sin titubeos. Hasta que los asesinos, violadores y delincuentes no sepan que cometer un delito tiene consecuencias directas para toda su vida, seguiremos viviendo bajo este flagelo que es la inseguridad», agregó.
El alcalde de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, que compite con Bullrich en la interna opositora, publicó en un tono más moderado: «No hay palabras para tanto dolor. Mis condolencias a la familia de Morena y sus seres queridos. Necesitamos justicia. Voy a acompañarlos para exigirla».
El último en suspender su cierre de campaña, el precandidato oficialista y ministro de Economía, Sergio Massa, quien iba a protagonizar un evento en La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires.
«Ante el doloroso crimen de Morena ocurrido esta mañana en Lanús, Unión por la Patria decidió suspender el acto de cierre de campaña previsto para mañana en el Teatro Argentino de La Plata. Acompañamos a sus familiares y pedimos justicia», publicó en Twitter la cuenta oficial de la coalición oficialista.
Quien ya había suspendido su acto de hoy era el gobernador provincial, el también oficialista Axel Kicillof, que iba a presentarse en Merlo y que, en un comunicado de su Ejecutivo, explicó: «Nada devolverá la vida de Morena, pero este crimen tan espantoso, que conmueve a toda la comunidad, no quedará impune».
Argentina celebra el domingo las elecciones PASO (primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias), de las que saldrán los candidatos que competirán en las elecciones generales del 22 de octubre.
EFE