En menos de 48 horas, el presidente del Instituto Nacional de Hipódromos (INH), Antonio «el Potro» Álvarez, estuvo detenido por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), sufrió un infarto, tuiteaba desde su casa y se reunió para organizar eventos de Navidad para niños de escasos recursos. Todo esto después de ser tendencia al aparecer con Fernando Carrillo en el Poliedro de Caracas, hablando de la tecnología de primera generación que se instalaba para el sonido del coso caraqueño y con una pistola en el bolsillo del pantalón.
Tras cientos de especulaciones en redes sociales, Álvarez reapareció este domingo 17 durante un fugaz saludo hecho por Nicolás Maduro en el acto de clausura del Gran Congreso del Bloque Histórico de Venezuela, una actividad que inició el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) tras las elecciones presidenciales.
El Pitazo consultó a fuentes del PSUV, trabajadores del INH y fuentes cercanas a Álvarez para saber sobre el estatus del exbeisbolista, cantante y dirigente oficialista.
«Aquí con ‘el Potro’ podemos aplicar aquello de ‘cuando el río suena, piedras trae’. Diosdado Cabello, en su nuevo rol de ministro de Interior, está jugando a una lucha contra la corrupción. En el hipódromo y el poliedro la hay», asegura una fuente del PSUV consultada por El Pitazo y quien pidió la reserva de su identidad.
«Esta semana que pasó hubo movimiento del Sebin en esos espacios —afirma la misma fuente— y en las oficinas del ‘Potro’. ¿Qué buscaban o si encontraron algo? No lo sé. Pero él está contando con la protección de Delcy y del propio Maduro para saltarse estas revisiones. No sé cómo terminará la historia».
Otras dos fuentes del partido oficialista consultadas sobre el estatus del ‘Potro’ Álvarez niegan su detención, pero al igual que la primera, confirman que existe una investigación, que se inició a solicitud de Diosdado Cabello.