El ministro de Patrimonio de Israel, el ultraderechista Amichai Eliyahu, ha asegurado que el lanzamiento de una bomba atómica contra la Franja de Gaza podría ser una de las opciones en la guerra que enfrenta a su país con el grupo islamista Hamás desde el pasado 7 de octubre, informó hoy el diario The Times of Israel.
Según el medio, el ministro del partido Poder Judío, el más ultraderechista del Gobierno, preguntado en el programa de radio Radio Kol Berama sobre si se debería lanzar una bomba atómica en el enclave palestino contestó: “Esa es una de las posibilidades”.
Las declaraciones de Eliyahu, conocido por sus posturas ultras, como su propuesta de anexionar a Israel el territorio ocupado de Cisjordania, han obligado al primer ministro Benjamin Netanyahu a desautorizarlo inmediatamente.
“Las palabras de Amichai Eliyahu están alejadas de la realidad”, dijo Netanyahu, citado por el mismo medio.
El primer ministro israelí insistió en que el Ejército está actuando “de acuerdo con los más altos estándares del derecho internacional para evitar daños a personas no involucradas” y agregó que continuará haciéndolo hasta » lograr la victoria”.
Según diversas fuentes, el Estado judío desarrolló armamento nuclear de forma encubierta hace más de 50 años. Hasta ahora, no admite ni niega su posesión y es el único país del mundo que no lo reconoce abiertamente; pero es un secreto a voces que es un Estado nuclear y figura como tal en los listados de instituciones de investigación atómica.
Israel está inmerso en una guerra contra el grupo Hamás desde que el brazo armado de esta organización perpetró el 7 de octubre un ataque contra Israel que dejó más de 1.400 muertos (la mayoría civiles), 5.400 heridos y al menos 241 secuestrados en Gaza.
La ofensiva militar de Israel sobre el enclave palestino ha dejado casi 9.500 muertos (la mayoría niños y mujeres), más de 24.000 heridos y unos 1,5 millones de desplazados, quienes padecen condiciones de vida extremadamente difíciles por el colapso de los hospitales y la grave escasez de agua potable, alimentos, medicinas, electricidad y combustible.
Fuente :El Comercio