Tanto China como Rusia expresaron su «preocupación» y llamaron a la «contención» ante la escalada de tensiones en Oriente Medio después de que Irán lanzara, la madrugada de este domingo, drones y misiles en un ataque de represalia contra Israel. Ambos gigantes asiáticos pidieron actuar con «moderación».
El Gobierno ruso pidió contención a todas las partes, no sin antes lamentar que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas fuera incapaz de responder «de manera adecuada» al bombardeo previo del Consulado de Irán en Damasco, atribuido a Israel y considerado el catalizador de la ofensiva de esta pasada noche.
Rusia denunció en numerosas ocasiones el sentido de las votaciones de Estados Unidos, como Moscú, miembro permanente con derecho a veto en el máximo órgano ejecutivo de Naciones Unidas. En lo que concierne a Oriente Próximo y especialmente sobre la guerra entre Israel y Hamás, marco del ataque iraní, ambas potencias expresaron opiniones radicalmente distintas sobre propuestas de resolución al respecto.
En último término, Rusia expresó su preocupación por «otra escalada peligrosa en la región» generada por una incapacidad de resolver las numerosas crisis abiertas en Oriente Próximo, «a menudo alimentadas por acciones de provocación irresponsables».
Por su parte, China está «profundamente preocupada» por la situación, según recoge este domingo un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores. Este primer ataque directo de Irán contra el territorio israelí aumenta la amenaza de un conflicto más amplio en la región donde China trató de desempeñar un papel de mediador y de donde proviene una creciente proporción de sus importaciones de energía.
«China pide a las partes pertinentes que mantengan la calma y ejerzan moderación para evitar una mayor escalada de tensiones», comunicó el portavoz en una declaración publicada en el sitio web del ministerio. «China pide a la comunidad internacional, especialmente a los países influyentes, que desempeñen un papel constructivo en el mantenimiento de la paz y la estabilidad regionales», añade el comunicado.
Más tensiones regionales
El Ministerio de Asuntos Exteriores chino afirma que esta ronda de tensiones es una consecuencia «del conflicto de Gaza», y añadió que sofocarlo lo antes posible era «una máxima prioridad».
China había pedido a Irán que ayudara a frenar los ataques a barcos en el Mar Rojo por parte de los hutíes respaldados por Irán, a cambio de no dañar las relaciones comerciales con Beijing. La embajada china en Irán aconsejó a los ciudadanos y empresas chinos en el país que reforzaran las precauciones de seguridad, según la televisión estatal china CCTV.