33 hombres fueron detenidos el domingo 23 de julio por presuntamente participar en una fiesta sexual que se llevó a cabo en un local privado localizado en la ciudad de Valencia, en el estado Carabobo.
El procedimiento, llevado a cabo por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), ocurrió específicamente en un local llamado Avalon Club, que funciona como un sauna en el sector Los Sauces de Valencia.
Los aprehendidos, con edades que van de los 21 a los 57 años, fueron trasladados a la comandancia principal de la PNB ubicada en Los Guayos.
Los oficiales incautaron en el procedimiento una gran cantidad de teléfonos celulares, equipos de grabación y preservativos.
Aunque el Código Penal no establece que sea un delito las relaciones sexuales consensuadas entre adultos, la PNB alegó que los detenidos estaban grabando las acciones con el objetivo de comercializar el material.
Sin embargo, los funcionarios policiales publicaron fotografías y las identidades de los detenidos que participaron en la presunta fiesta sexual en una minuta policial, lo que expuso a estas personas al escarnio público, posibles represalias y discriminación por su orientación sexual.
La situación ha generado polémica en la comunidad debido a que muchas personas consideran que el acto de exponer a los detenidos es una falta de respeto a la diversidad y la libertad en el país.
La Asociación Civil Venezuela Igualitaria denunció la actuación de los cuerpos de seguridad del Estado en contra de los miembros de la comunidad LGBTIQ+ y pidieron al fiscal general de la República, Tarek William Saab, que investigue lo sucedido.
«Denunciamos ante el fiscal Tarek Wiliam Saab que investigue y castigue la actuación de la PNB en el caso del sauna allanado en Valencia el 23 de julio sin más motivo que por ser un lugar LGBTI, sometiendo a los detenidos al escarnio público por su sexualidad y condición de salud», señaló la organización en Twitter.
Fuente : EFE